Siempre se ha dicho, y es una gran verdad, que es mejor dedicar unos minutos al descanso que seguir forzándose a trabajar en un momento de saturación. Pasar horas y horas investigando y redactando un TFG sin descanso, así como cualquier otro trabajo, solo lleva a una cosa: la saturación. Y la saturación ralentiza de manera muy pronunciada nuestro rendimiento. El estrés y la falta de tiempo suele ser, de manera general, lo que nos lleva a agobiarnos en el momento de redactar nuestro trabajo final, sin embargo —como decíamos más arriba—, siempre es más aconsejable descansar unos minutos y emplear algunas técnicas de relajación cada cierto tiempo, que seguir forzándonos para acabar el trabajo. Esto nos ayudará a mejorar nuestro rendimiento y productividad.
En este artículo vamos a explicarte las mejores técnicas de relajación para la ansiedad y el estrés. Te explicamos en qué consisten las técnicas de relajación para estudiantes y cuándo aplicarlas. ¡Vamos a ello!
¿Cada cuánto tiempo es recomendable descansar al hacer un TFG?
No hay una fecha exacta para descansar estudiando, sin embargo, son varios los especialistas y estudios que —al hablar de técnicas de relajación— recomiendan programar un descanso cada 45 minutos o cada 1,5 horas. Y es que, según estos estudios, cuando se excede de los 50 minutos de trabajo intelectual intenso, la capacidad para mantener la concentración en la tarea disminuye. Es decir, a partir de este momento la capacidad de concentración baja y esto repercute en que te cueste mucho más esfuerzo hacer un trabajo, llegando incluso a agotarte. El descanso, sumado a la aplicación de una o varias técnicas de relajación, te ayudará a retomar tu labor con más energía.
¿Cuáles son las técnicas de relajación que existen?
Las técnicas de relajación para estudiantes son ejercicios que sirven para disminuir la tensión física o mental. Existen diferentes métodos que pueden ayudarte a superar con éxito estos momentos de gran tensión y a afrontarlos con la mejor actitud posible. Como prometíamos más arriba, te explicamos cuáles son las 7 técnicas de relajación para la ansiedad y el estrés más efectivas.
Técnicas de relajación: Los ejercicios de respiración
Los ejercicios de respiración son clave a la hora de responder a cuáles son las técnicas de relajación que existen. Y es que la respiración es fundamental para oxigenar el cuerpo y liberar el estrés. Son muchos los diferentes tipos de ejercicios que podemos encontrar en este caso, nuestra recomendación es que durante unos 10 o 15 minutos cierres los ojos y practiques la respiración. Respira lentamente y llena tus pulmones de aire, después expira hasta vaciarlos por completo. Debes centrarte en el sonido de tu respiración y repetir el ejercicio tantas veces como sea necesario.
Técnicas de relajación: La meditación
Desde los tiempos ancestrales, la medicación ha sido y sigue siendo una de las técnicas de relajación y profundización en cada uno más efectivas y populares que existen. Meditar es entrenar la mente e inducir un modo de conciencia, además hay varias formas de hacerlo. Nuestra recomendación es que te sientes o te tumbes en una postura cómoda. Después respira por la nariz y exhala por la boca de manera rítmica y suave —siendo consciente, en todo momento, del proceso—. A continuación, con la atención puesta en la respiración, repite un mantra en el momento de inhalar. El mantra es una frase positiva del tipo “Puedo con esto”, “Todo tiene una solución”, “Valgo mucho” y demás.
Ahora bien, en el momento de exhalar, debes modificar tus pensamientos y enfocarlos en aquello que no necesitas y que quieres eliminar de tu vida. Por ejemplo: “Me deshago del estrés”, “Dejo que se vayan mis preocupaciones”, “Dejo de criticarme y de ser tan duro/a conmigo/a mismo/a”. Con esta técnica de relajación para la ansiedad y el estrés conseguirás liberarte de tus preocupaciones al hacer el TFG y seguir dando lo mejor de ti. Te recomendamos que apliques esta técnica durante 10 minutos, las veces que necesites.
Técnicas de relajación: El entrenamiento autógeno de Schultz
Esta técnica de relajación para estudiantes y para cualquier otra persona se basa en la autosugestión. La misma permite concebirse como una unidad, de manera que el cuerpo y la mente no son partes separadas, lo que da lugar a una mayor relajación muscular. Esta es efectiva como terapia para trastornos de ansiedad y psicosomáticos, entre otras. Para practicarla la persona debe convencerse a sí misma de que las extremidades pesan y repetir durante todo el proceso la frase “Estoy tranquilo/a” u otros mantras. Es aconsejable comenzar sentado/a en una silla con la postura lo más relajada posible (apoyando antebrazos sobre las piernas y dejando caer las manos sobre ellas, además las piernas deben estar ligeramente separadas). Mientras se aprende esta técnica se recomienda practicarla tres veces al día en sesiones de 5 minutos. Los ejercicios se basan en la pesadez, el calor, las pulsaciones, la respiración, el abdomen y la mente.
Técnicas de relajación: Los ejercicios de estiramiento
Cualquier tipo de estiramiento te vendrá bien para liberar el estrés a la hora de hacer tu TFG y soltar todo el estrés que tienes acumulado. Comienza girando tu cabeza 180º y después pasa a los brazos y piernas del cuerpo. Hay muchas posturas de estiramiento, las más populares son las de pierna y espalda, la pose del niño, la mariposa, la postura de la cobra, la media luna y la pinza hacia delante.
Técnicas de relajación: La imaginación guiada
La imaginación guiada, como su nombre indica, se basa en autosugestionarse para encontrar la paz. Con tu mente debes desplazarte hasta un lugar que te haga sentir bien, incluso hasta una situación —cada quien debe pensar en aquello que le transmite paz—. Para practicar esta técnica de relajación para la ansiedad es fundamental tumbarse, pero no apretar demasiado los ojos. La superficie tampoco debe ser excesivamente cómoda para no dormirse.
Técnicas de relajación: La relajación muscular progresiva de Jacobson
Está técnica permite reducir la ansiedad con procesos físicos. Para ello, es fundamental estar sentado/a o tumbado/a sobre una cama. Después, se deben tensar y relajar los músculos de los dedos de los pies. A continuación, el proceso asciende hasta arriba, concluyendo en la cabeza. Si lo deseas también puedes hacerlo a la inversa, de arriba abajo. Es aconsejable que contraigas los músculos durante unos 5 segundos y dejes que se relajen durante unos 30 segundos.
Técnicas de relajación: Escuchar música
Aunque parezca algo muy sencillo para responder a cuáles son las técnicas de relajación que existen, es importante mencionar que la música resulta muy efectiva. Esta te ayudará a hacerte sentir más a gusto y calmado/a. Además, la música tiene la capacidad de estimular la concentración y ayuda a estudiar y memorizar mejor.